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Si estás pensando en emprender, pero aún sigues trabajando de manera de dependiente, es probable que te falte un impulso para dejar el trabajo asalariado y atreverse con ser tu propia jefa. Los expertos llaman a este cambio de actitud salir de la zona de confort, es decir dejar aquello que nos parece mucho más cómodo, conocido y fácil.

Una de las principales lecciones que se pueden aprender de los libros del escritor y asesor de negocios Robert Kiyosaki es que es necesario realizar un cambio de mentalidad; es decir, salir de la zona de confort y obtener las herramientas necesarias para que se convierta en una emprendedora, es decir, en constructora de tu propio camino.

Ante esta incertidumbre de seguir en un trabajo o ser una emprendedora, me permito poner a tu consideración algunos puntos clave que puedes meditar para saber cuál es el camino que se acopla mejor a tu carácter y a tu actitud.

Seguridad

No cabe duda de que existen empresas con excelentes prestaciones que te permiten tener una seguridad salarial, pero ¿es esa seguridad suficiente para ti?
 
Aventura

Este es uno de los elementos característicos de las emprendedoras. Debes estar consciente de que cuando decidas entrar en este camino pasarás por momentos de incertidumbre, momentos que te pueden desanimar y hacerte claudicar de tus sueños y proyectos.

La carrera del emprendimiento es más de resistencia que de velocidad y, sobre todo, de tener metas fijas acerca de lo que quieres lograr. La aventura y la incertidumbre son las dos palabras que más asustan a los jóvenes y por lo cual deciden buscar opciones que les otorguen mayor seguridad.

Proyecto

Tener  capacidad de decisión. Esa decisión se manifiesta desde el momento en que decides comenzar tu proyecto. Uno de los beneficios de elegir este camino radica en ser tu propio patrón, en que nadie más que tú pone las reglas y sobre todo los límites de tu proyecto.

Conocer tus límites

Toda emprendedora debe conocer su capacidad para resolver problemas. En la primera etapa te darás cuenta si estás lista o no para el mundo de los negocios y hasta qué punto puedes atreverte en este desafío.
 
¿Estás a punto de salir de la zona de confort?