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Muchas veces las emprendedoras comenzamos nuestros negocios en nuestra propia casa e incluso nos formalizamos como Microempresa Familiar. Siempre que trabajemos en nuestra casa debemos aprender dos puntos claves: delimitar espacios y mantener una rutina laboral clara.

Para mantener de buena forma tu negocio en tu hogar considera estos consejos:

Delimita un espacio de trabajo: es necesario definir cuál será el espacio físico donde estará tu oficina o punto de atención al público. Este lugar debe estar alejado de las distracciones familiares. Lo ideal sería que tuvieras poca vía de comunicación con tu casa Si es un trabajo manual tiene que existir un taller en el cual puedas concentrarte, si es frente al computador, un escritorio definido como tal. Lo importante es marcar los límites y contar con un espacio tranquilo para mantener la productividad.

Tener una rutina establecida: para lograr el convencimiento de que el trabajo desde la casa es lo que genera ingresos, hay que mantener una estructura. Esto parte desde levantarse a la misma hora, vestirse, tomar desayuno, etc.

Alejarse de las distracciones personales: este punto puede ser el más difícil, ya que las distracciones siempre estarán a la mano y a pocos pasos. Una de las distracciones más importantes en este sentido es el cuidado de la familia, por eso la recomendación es que en la medida de lo posible, establezcas horarios para estar con ellos, por ejemplo para preparar el almuerzo o dárselo a los más pequeños, pero no para que estén todo el tiempo pendiente de tus niños.

Buscar espacios de recreación fuera del hogar: estar todo el tiempo en la casa puede ser agobiante para el estado anímico. Incorpora en la rutina actividades que permitan hacer un quiebre en la casa/oficina. Salir a caminar, extender un poco la visita a clientes para distraerte, es necesario y útil.

¿Has aplicado alguno de estos consejos en tu caso o cómo tratas de compatibilizar tu emprendimiento en el hogar?