Reputación online: por qué cuidar la imagen de nuestra marca

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Seguramente has escuchado hablar de la reputación de marca, pero en esta oportunidad nos enfocaremos específicamente en aquella que nos afecta en el mundo digital.

Todo lo que hacemos y decimos habla de nosotros, y con eso que vamos comunicando a otros, es que vamos construyendo la imagen que otros tendrán de nosotros. Y no sólo nos referimos a las marcas; como consumidores también nos preocupamos que nuestras fotos de redes sociales nos presenten como la persona que queremos mostrar al mundo.

A diferencia de nuestro círculo personal, hoy en día la opinión que los clientes tienen de las marcas se ve reflejada en los comentarios de redes sociales, blogs y reseñas o recomendaciones. Así, queda en evidencia lo que piensan de nosotros y eso va amplificándose a cada persona que lo lee. Digamos que es una versión moderna del “boca a boca”.

Entonces, tener una buena reputación online nos da muchas ventajas. Entre ellos, mejora nuestro posicionamiento en motores de búsqueda, atrae más fuertemente a potenciales clientes y te ayuda a fidelizar a los que ya tienes.

Para gestionar correctamente tu reputación online te recomendamos seguir estos tres pasos: primero, investigar lo que la gente dice de ti. Esto será un proceso donde deberás navegar en Internet para encontrar opiniones, críticas y comentarios ya sea de tu empresa, o tuyos. Y ojo que no sólo te evalúan tus clientes, también lo hacen tus empleados.

Luego, analiza todo lo que hayas encontrado. Separa lo positivo de lo negativo y enfócate en cómo potenciar lo primero y resolver lo segundo, con un protocolo ordenado y eficiente a seguir.

Finalmente, hazte presente. Muéstrate disponible para resolver aquello en lo que está fallando. Recuerda que para los clientes lo más importante es sentir que son importantes para las marcas.

Aprovecha las funcionalidades de las diferentes plataformas que existen hoy en día: Whatsapp, redes sociales, Mailchimp, sitios web, formularios de Google, etc., para mantener una conexión constante con lo que están hablando de ti.

Finalmente, recuerda mantener siempre un buen servicio de atención al cliente. Es importante estar siempre disponible y participar de la conversación de forma activa, y no sólo escuchar desde afuera.

¡Sigue estos pasos y podrás construir una reputación corporativa digital que no fallará!

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