Instagram se ha mantenido como una de las plataformas sociales más importantes, por lo que este 2021 debemos seguir dándole un lugar importante en nuestra estrategia de marketing.  

Ser parte de Instagram entrega una serie de beneficios tanto para las marcas como para el público. Uno de ellos es generar confianza; cuando encontramos una cuenta bien cuidada y con contenido de calidad, inmediatamente sentimos una conexión (o al menos algo de curiosidad) que nos hace seguirla.  

De la misma manera, cuando el contenido es coherente –tanto en sus mensajes como en el diseño– esto ayuda a que las marcas aumenten su reconocimiento, es decir, que los clientes puedan reconocerla aún cuando no tenga un logo asociado.   

Otra ventaja es el tráfico; sacarle provecho al enlace de la bio y de las historias se ha vuelto una obligación. Usa estas alternativas para sacar a tu público de Instagram y llevarlos a tu sitio web, a tu tienda, ¡o donde quieras! 

Considerando estos beneficios, es clave dedicarle tiempo a nuestra presencia en esta red social. Pero más que cantidad, se trata de calidad, es decir lo que debemos hacer es fortalecer nuestra marca, para que sea atractiva y distinta de la competencia.   

Lo más sencillo para empezar es revisar tu perfil. Esto incluye tu foto, tu biografía y las historias destacadas. Esta es tu carta de presentación y es muy importante que elijas colores y un logo que transmitan lo que tu marca quiere transmitir.   

La coherencia es clave, y por eso, la personalidad que tenga tu perfil debes mantenerla en todo lo que hagas. Cuando entres a tu muro debe verse uniforme en diseño y también en contenido, para que los usuarios entiendan rápidamente lo que están mirando y se conecten con eso (si es que son la audiencia que buscas).  

El tono y la voz de la marca también son clave en este proceso. Para eso hazte preguntas como ¿cuál es la personalidad de mi marca?, si fuera una persona ¿cómo sería? ¿Cómo hablaría? Déjala que hable por sí misma, escúchala y seguro tendrá mucho que decir.  

La frecuencia es clave. Si bien no es recomendable publicar con demasiada frecuencia, tu marca debe estar siempre presente en la mente de tu audiencia. Si no quieres postear todos los días –o no tienes suficiente contenido para hacerlo– puedes combinarlo con las historias, que usan contenido mucho más relajado y fresco. 

Si bien las redes sociales son rápidas, una estrategia de branding para Instagram implica tiempo. Sólo así sabrás qué decir y cómo decirlo, sin caer en la costumbre o dejar de generar contenido que genere valor para tu marca. Sólo planificando podrás organizar tu contenido, diseñarlo con tiempo y mantenerte vigente.    

Mejora tu presencia en Instagram poniendo en práctica todos estos consejos. ¡Ya verás como empiezas a construir una comunidad cada vez más grande!