Ya les hemos contado sobre el nuevo consumidor; uno que busca recomendaciones en amigos y en otros consumidores (más que en las marcas mismas); que experimenta y no es fácil de fidelizar. Por eso, hoy queremos ayudarte a llegar a tus clientes y hacer que amen tu marca, así, ellos mismos serán tus mejores embajadores. 

1. Responde a sus demandas 

Es cierto que somos una marca y queremos vender, pero también somos consumidores. Por eso, la mejor manera de entender lo que un cliente necesita, es pensar en lo que uno mismo necesita.

Imagina que compraste algo por Internet, pero no llega en el plazo que te dieron. Escribes a la empresa, y rápidamente te llega un correo de respuesta, pidiendo disculpas por el error y dispuestos a resolverlo rápidamente. En este caso, la consideración de la marca es suficiente para que el cliente se sienta satisfecho con la experiencia, a pesar del error. Lo que los consumidores de hoy esperan de las marcas es ser escuchados. 

¡Como en cualquier relación, la confianza es lo más importante!

2. Define tu personalidad

Para que tus clientes se vuelvan embajadores de tu marca, esta debe tener una personalidad reconocible y con valores marcados; así, quienes te siguen también lo harán porque se sienten identificados. Así crearás una relación emocional con ellos, y esto reforzará el compromiso de la misma manera en que cualquier se compromete con alguien que quiere.  

Para lograrlo, es muy importante la narrativa que entregas, es decir, cuál es la historia de tu marca, cómo se comporta y qué la hace diferente del resto. Incluso el logo o los colores pueden formar parte de esa narrativa, por eso, es importante que todo sea coherente con lo que quieres comunicar. 

3. Mantén el contacto con tus clientes

Es imprescindible mantener el contacto, pero sin hostigarlos. Además de estar en redes sociales, puedes enviarles correos con noticias, eventos, o con beneficios especiales para ellos, así, sentirán que los regaloneas y que ellos son parte importante de la marca. Así irás potenciando el lazo que tienen contigo y te volverás parte de su vida. 

4. Presencia en las redes sociales

Las redes sociales son una vitrina, es cierto, pero también es el lugar para crear comunidad. Para eso, entrégales contenido entretenido y dinámico. Esto fomentará que hablen de tu negocio pero también de otros temas que son interesantes para ellos, ampliando así el espectro de donde se mueve tu marca. 

Aquí puedes crear concursos donde ellos sean los protagonistas, por ejemplo, enviando una foto con la mejor combinación de ropa de tu tienda. 

Las personas pueden sentirse un poco perdidas por la cantidad y variedad de marcas que hay en el mercado para el mismo producto. Por eso, si construyes una narrativa atractiva y cumples las promesas que prometes, tus clientes se conectarán emocionalmente con tu marca y se convertirán en algo mucho más valioso para tu empresa: embajadores de tu  marca.