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Cuando hablamos de ahorro siempre tenemos la tendencia en pensar en el ahorro personal, el que influye en nuestros gastos cotidianos, del hogar y todo aquello que nos envuelve. Pero  casi nunca nos detenemos a pensar en el ahorro de nuestro negocio.

En este artículo te vamos a contar algunas medidas básicas de ahorro para tu negocio,  que te ayudarán a ahorrar dinero para tu negocio.  

¿Cómo puedo ahorrar dinero en mi empresa o negocio?

Si puedes hacerlo tú mismo, hazlo. Así evitarás tener que pagar a otras personas por ello. Para ahorrar es necesario hacer ciertos sacrificios, y entre ellos se encuentra el evitar recurrir a otras personas para que hagan lo que tú puedes hacer. 

Un ejemplo básico puede ser que arreglar tu propio computador. Obviamente la idea es que sepas de este tema y no te aventures a adivinar y con ese conocimiento en mano te evitar contratar a un técnico que te puede cobrar una cantidad importante de dinero por ello.

Otro caso es evitar los denominados “gastos hormiga”. Se trata de pequeños gastos, que sin darte cuenta, haces cada día. En el momento del desembolso parecen poca cosa, pero si los sumas te darás cuenta que la cifra es mucho más alta de lo que imaginabas. Estamos pensando en ese chocolate o café extra que compraste o bien de algún cosmético que en realidad no era urgente o para el negocio un nuevo tapete pero que de verdad no era necesario tampoco estaba en oferta. Estos pequeños gastos que pasan inadvertidos te piden sobre todo invertir o  ahorrar para imprevistos.

Ahorra en los gastos básicos con pequeñas pautas. Electricidad, agua, material de oficina, combustibles, teléfono, etc. Con pequeños detalles puedes ahorrar una gran cantidad de dinero. Sólo tienes que saber cómo ahorrar en estos gastos e implementarlo poco a poco. Para ahorrar electricidad, por ejemplo,  debes acondicionar bien el local, utilizar sólo cuando necesites, recurre a elementos de bajo consumo y  sobre todo que las instalaciones sirvan, es decir que iluminen donde es necesario y no hacia una pared,  un buen aislante térmico en los muros o pinturas de colores claros te permiten iluminar mejor tu negocio y favorecen su calefacción y/o ventilación.

 Usa el agua con racionalidad, sin derroche y aprovechala en cuanto te sea posible. Para ahorrar tinta no imprimas más que lo que consideres necesario. Para ahorrar papel anota todo lo que puedas en papeles usados que ya no sirven y aprovecha las dos caras. Para ahorrar teléfono utiliza bonos de llamadas y evita que se use para llamadas personales. Para ahorrar  gasolina, recurre lo menos posible al auto, utiliza unas pequeñas pautas de buena conducción y compra gasolina donde  esté  más barata.

Las marcas no siempre son necesarias. Actualmente, se venden muchos productos sin marca de gran calidad y que suponen un coste inferior. Abandonando las marcas se puede ahorrar cerca de la mitad del dinero en muchas compras.

Las negociaciones constantes con proveedores serán tus principales aliados. Puedes negociar con frecuencia con tus proveedores para conseguir mejores precios que los actuales, sobre todo si haces compras importantes. Atrévete a buscar nuevos proveedores y comparar precios.

Aprovecha lo gratis. Hay tantos recursos gratuitos a disposición de las empresas que es difícil conocerlos todos, y en ocasiones hay quien no confía en ellos. El software libre puede ser interesante, porque hay muchos programas gratuitos para enviar mensajes a otras personas, hacer videollamadas, crear facturas, gestionar clientes, realizar la contabilidad de la empresa y muchas cosas más, por ejemplo, usa OpenOffice como alternativa a Microsoft Office. Hay quien regala productos o servicios a las empresas para que los prueben. Lo gratis siempre te ayudará a ahorrar importantes sumas de dinero.
 
¿ Estás en plan de ahorro para tu negocio?     Te parecieron útiles estos consejos.