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Define tus horarios para tu emprendimiento: se nos ha dicho que las mujeres hacemos muchas cosas a la vez, pero es la imagen correcta, no confunde nuestros roles  (La idea es indicarle a las mujeres que hagan un horario de trabajo entre las 9 a 13 horas sólo emprender, hacer trámites, etc, y en la tarde desde tal a cual hora, la idea es que ellas entiendan que no deben mezclar tiempos)

Muchas de nosotras nos hemos visto en la necesidad de dedicar más tiempo de lo necesario, debido a que no nos planificamos correctamente en lo que realizamos en un día. Es por dicho motivo que una mujer que busca lograr el éxito en su negocio debe definir correctamente sus horarios y con eso lograr hacer todo lo planificado.

Encontrar la fórmula perfecta para adaptar el horario a las necesidades de tus clientes y a las tuyas es cuestión de lógica y, de generar una rutina. Te contamos lo que debes tener en cuenta si te planteas una planificación o una revisión de la cantidad de horas que se dedica en tu empresa al trabajo.

Si eres dueña de un negocio, éstas son algunas claves para establecer horarios laborales beneficiosos para tus trabajadores:

• Fomentar el trabajo por objetivos y no que solo cumplan con el horario de trabajo.
• Ofrecer herramientas digitales para trabajar desde casa.
• Facilitar la jornada intensiva y la flexibilidad horaria
• Reducir los horarios de comida para acortar jornada.
• Acabar con las “excesivas” reuniones.
• Establecer horarios para reuniones, no convocarlas después de las 4 de la tarde.
• No premiar a empleados que se queden tarde en la oficina.

Pero atención, la clave es también que definas tus horarios.  Primero que todo no caigas en la tentación de trabajar en cualquier horario. Fija tus horas de trabajo y respetalas de esta manera podrás tener tiempo para otras actividades personales.

Ordena tus tiempos considerando las actividades claves como reuniones de trabajo, planificación, revisión de tus cuentas, encuentros con otras emprendedoras, etc. Lo importante es evitar mezclar los tiempos, es decir, si trabajas no estás pendiente de tu casa.

Planifica tu jornada. Planificar es el primer gran secreto. Basta con que dediques 20 minutos a esta tarea todas las mañanas o al finalizar tu jornada de trabajo. ¡No es tiempo perdido! Recuerda que la definición de una buena agenda de trabajo te permitirá priorizar con certeza y avanzar en los temas realmente importantes.

Si lo haces día con día, finalmente mejorará tu visión global sobre tu negocio y serás capaz de anticipar reuniones difíciles o identificar nuevas tácticas para mejorar tu desempeño.

Prioriza. Es común pensar que tienes más cosas por hacer que horas tiene el día. Por eso, un gran truco es aprender a priorizar. Así, te aseguras que las tareas más importantes no quedarán sin resolver.

Un tema cada vez. La concentración siempre es importante, aunque tengas que atender y solucionar muchos temas distintos. El objetivo es sencillo: ahorrar tiempo y minimizar errores.

Aprende a decir que no. Piensa en esto: de todas tus tareas, ¿cuántas son generadas por ti y cuántas son producto de haber dicho sí a un amigo, cliente o miembro de tu equipo? Evita los problemas intrascendentes y aprende a decir que no. Muchas veces los favores ni se agradecen ni se pagan.

¿Puedes organizar bien tus tiempos? Cuéntanos tu experiencia.